Los trabajadores españoles declaran una media de 19.359 euros anuales de renta anual, frente a los 8.275 euros de los empresarios

Los datos recogidos en la Memoria de la Administración Tributaria de 2009, publicada ayer por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas, servirían a cualquiera que no conozca a la clase empresarial española para comprender la envergadura de nuestra crisis económica. ¿Cómo no iba a estar en crisis un país en el que los trabajadores ganan más que los empresarios? Más de doble, según lo que declaran unos y otros al fisco. Se entiende así que la patronal pida moderación salarial

Y es que nuestros pobres empresarios debe tener difícil llegar a fin de mes, ganando, como declaran , una media de algo más de 8.000 euros al año, mientras que los trabajadores superan hasta 2,3 veces los ingresos de sus jefes. Lamentablemente, estos datos sólo vienen a poner de manifiesto que la “ingeniaría contable” funciona en nuestro país a pleno rendimiento, lo que supone que el sostenimiento de las arcas públicas, en lo que a Declaración de la Renta se refiere, recae casi exclusivamente en los trabajadores con nómina, cuyos ingresos reales están perfectamente controlados por el Ministerio de Hacienda.

Los datos, que se refieren al año 2009, en los albores de la crisis, revelan que más del 80 % de la recaudación del Estado vía IRPF procede de la clase trabajadora directamente a través de las retenciones practicadas en las nóminas, mientras que las rentas de capital ingresan poco más del 8 %, y lo declarado por “actividades económicas”, que es como tributan los empresarios apenas superaban el 6 %.

Según el informe del Ministerio de Hacienda, los trabajadores españoles ganaron una media de 19.359 euros por rentas del trabajo, frente a los 8.275 euros de los empresarios, aunque los que declaran por el sistema de “módulos”, según sus declaraciones, ni siquiera llegaron en 2009 a los 6.000 euros.

Atendiendo a estos datos, es fácilmente comprensible que la patronal y la banca clamen por una contención salarial, porque… ¿en qué cabeza cabe que en un país como España la clase empresarial tenga tan nimios ingresos frente a las “enormes ganancias”, en torno a ¡20.000 euros anuales!? Mientras los inspectores de Hacienda se siguen quejando de las escasas medidas de control que el Gobierno pone en sus manos, lo que sin duda permitiría descubrir qué podrían esconder muchos trabajadores que no llegan a los mil euros mensuales de ingresos, casi el 40 % en 2009. Está claro qué provoca la crisis.

 

Fuente: Perico Echevarria; http://www.diarioprogresista.es